INICIA UNA PAREJA CON EL PIE DERECHO

De una u otra forma, con mayor o menor empeño, a la mayoría de las personas nos gusta estar acompañadas de una pareja. Si bien los vínculos familiares y amistosos son de gran riqueza e intimidad, existe –más allá de la atracción física y el deseo sexual que no son algo menor– el anhelo de formar parte especial de la vida de otro y que ese alguien acompañe la nuestra de manera particular.

Te comparto algunas de las cosas que hemos de considerar para iniciar una relación con menos riesgo de “meter la pata”:

  1. “Acomoda tus cajones” antes de iniciar una nueva relación. Es decir, si tienes círculos amorosos que no has cerrado bien, si te quedan duelos pendientes, es momento de darle cabida a la pérdida, a la sensación de fracaso y dejar ir esa relación.
  2. Para evitar el “pan con lo mismo” observa que tipo de relaciones hiciste con anterioridad: ¿de dependencia?, ¿de control?, ¿de sometimiento? Reconoce la forma en que te enganchas para cuestionar el porqué de ese patrón.
  3. ¿Por qué estamos solos? Cuestiona si eres tú quien desea estar en pareja o si te sientes presionado por tu entorno social, familiar, o laboral. No siempre estamos con deseo de tener pareja, y se vale vivir de formas poco convencionales la vida personal.
  4. Cuestiona ideas “mágicas” sobre el amor como “el amor todo lo puede”, “el amor todo lo soporta”, “el amor es eterno”, “el amor perdona cualquier cosa”, “el amor es vivir siempre enamorado”. Todas y cada una de ellas, al pasar el tiempo, te llevarán a una desilusión.
  5. Ser atractivo implica ¡Atraer! El amor es un intercambio que permite el enriquecimiento de ambas partes. Checa qué quieres que el otro te dé, pero sé claro de lo que tú también aportas a la relación.
  6. Di adiós al miedo al rechazo. No somos “monedita de oro”. Que alguien no te quiera no significa que no seas querible. El que no arriesga (inteligentemente), nunca se conocerá, nunca aprenderá amar, y no podrá capitalizar la experiencia de los fracasos amorosos.
  7. Aprende a ser seductor en todo el sentido de la palabra, es decir a mostrarte responsable de ti mismo, alegre, abierto, curioso. Muestra cuidado de tu persona, de tus palabras, de tus posesiones. Juega con las palabras, comparte su saber y tu experiencia. Seducir es hacer que el otro se interese por ser parte de tu mundo y de tu vida.
  8. Ten una vida llena de pasiones de modo que el amor no sea tu único proyecto de vida. Ama, sí, cuando haya a quién amar, pero enamorate de tu vida personal.

 

Facebook: Tere Díaz Psicoterapeuta

Twitter: @tedisen

Instagram: terediazsendra

 

(Visited 187 times, 1 visits today)